Neuroticismo, todo lo que tienes que saber

¿Alguna vez te has sentido ansioso, triste, culpable o enfadado sin una razón aparente? ¿Te resulta difícil controlar tus emociones y te agobias con facilidad? ¿Te consideras una persona insegura, pesimista o perfeccionista? Si has respondido afirmativamente a alguna de estas preguntas, es posible que tengas un alto nivel de neuroticismo.

Pero, ¿sabes qué es el neuroticismo, cómo se manifiesta o qué puedes hacer para reducirlo? Te lo cuento a continuación con lujo de detalles.

¿Qué es el neuroticismo?

El neuroticismo es un rasgo de personalidad que nos hace más susceptibles a las emociones negativas y al estrés. Es uno de los cinco grandes rasgos de la personalidad, y aunque un poco de neuroticismo puede ser útil para motivarnos o alertarnos de peligros, un exceso puede afectar nuestra salud mental y felicidad.

Por lo general se cree que los rasgos de personalidad permanecen estables a lo largo de la vida, sin embargo, el neuroticismo se puede tratar y mejorar con terapia.

Este rasgo de personalidad se evalúa en la mayoría de las pruebas de personalidad. Aunque existen diversas teorías y pruebas en este ámbito, una de las más reconocidas y utilizadas es la de Los Cinco Grandes Rasgos de Personalidad.

Los Cinco Grandes dividen la personalidad en cinco rasgos principales, en los que una persona puede obtener una puntuación alta o baja. Estos rasgos son:

Obtener una puntuación alta en neuroticismo está relacionado con experimentar emociones negativas como el miedo, la tristeza y la ira con mayor intensidad, frecuencia y duración.

Síntomas de una persona con neuroticismo 

Es crucial reconocer que existen varios síntomas asociados con niveles más severos de neuroticismo.

Entre ellos se encuentran el estado de ánimo bajo, la depresión leve, la distimia (una melancolía recurrente), y la manifestación de sentimientos negativos como la ira, la frustración, la culpabilidad, la ansiedad y la envidia, entre otros, que son comunes en personas con una personalidad neurótica.

Algunos de los indicadores y características específicas que se utilizan para identificar el neuroticismo incluyen:

• Irritabilidad y baja tolerancia a la frustración
• Nerviosismo frecuente
• Preocupación constante
• Sentimientos de soledad o aislamiento
• Cambios de humor o sensación de subidas y bajadas
• Sensibilidad extrema a las ofensas
• Tensión y rigidez muscular
• Frecuentes sentimientos de culpa o vergüenza
• Tendencia a la autocrítica excesiva
• Rumiación sobre pensamientos negativos
• Reacciones exageradas al estrés
• Ira, hostilidad y resentimiento
• Inseguridad, timidez y autocrítica

Test de neuroticismo

Si crees que puedes ser una persona neurótica, responde a este test con “Sí” o “No”:

• ¿Te sientes ansioso o preocupado con frecuencia?
• ¿Tienes cambios de humor repentinos?
• ¿Te irritas fácilmente por cosas pequeñas?
• ¿Te resulta difícil relajarte?
• ¿Te sientes a menudo triste o deprimido sin una razón clara?
• ¿Te preocupas mucho por lo que piensan los demás de ti?
• ¿Te sientes culpable o avergonzado con frecuencia?
• ¿Te resulta difícil olvidar experiencias negativas del pasado?
• ¿Te sientes a menudo solo o aislado?
• ¿Te cuesta manejar el estrés?

Cuenta cuántas veces has respondido “Sí”:

• 0-3: Bajo nivel de neuroticismo.
• 4-6: Nivel moderado de neuroticismo.
• 7-10: Alto nivel de neuroticismo.

Recuerda que este test es solo una guía y no un diagnóstico profesional. Si sientes que el neuroticismo está afectando tu vida, considera hablar con un profesional de la salud mental.

¿Qué significa ser una persona neurotica?

El neuroticismo se refleja en la medida en que una persona se identifica con frases como “me preocupo mucho por las cosas”, “me irrito con facilidad” o “a menudo me siento triste”.

Las personas con altos niveles de neuroticismo suelen tener dificultades para regular sus emociones y manejar el estrés, lo que hace que estas emociones sean aún más abrumadoras. La falta de habilidades efectivas para afrontar estas situaciones puede llevarlas a reaccionar de manera destructiva, impulsiva o inadecuada, creando más problemas y estrés a largo plazo.

Sin embargo, el neuroticismo no es necesariamente negativo. También puede indicar una mayor empatía, creatividad y conciencia de los problemas. Además, no es un rasgo fijo e inmutable; puede cambiar a lo largo de la vida y según el contexto.

Consecuencias del neuroticismo

El rasgo de personalidad neurótica puede tener diversas repercusiones en la salud mental y física, las relaciones sociales y el bienestar general de una persona. Algunas de las más comunes son:

• Ansiedad y depresión: Las personas con altos niveles de neuroticismo son más propensas a sufrir trastornos de ansiedad y depresión debido a su dificultad para manejar el estrés, las emociones negativas y los pensamientos irracionales.
• Fobias y trastornos de pánico: Son más vulnerables a desarrollar fobias y trastornos de pánico, que son miedos irracionales e intensos a objetos, situaciones o estímulos específicos, y pueden provocar ataques de pánico.
• Irritabilidad y volatilidad emocional: Suelen experimentar cambios de humor frecuentes y reaccionar de manera exagerada o desproporcionada ante los eventos cotidianos, lo que puede generar conflictos, malentendidos y problemas de comunicación, así como sentimientos de culpa, vergüenza o arrepentimiento.
• Dificultad para disfrutar de actividades sociales: Tienden a evitar o rechazar actividades sociales que podrían proporcionarles placer, diversión o relajación, por temor a ser juzgados, criticados o rechazados, o anticipando posibles dificultades o problemas. Esto puede llevar al aislamiento social, la soledad y la pérdida de oportunidades de crecimiento personal.

Conviene subrayar que el neuroticismo conlleva una serie de consecuencias adicionales, influyendo en cómo las personas se relacionan y comunican eficazmente. Las personas neuróticas tienden a presentar problemas en el ámbito familiar, personal, académico y laboral, hasta el punto en que, en casos agudos, pueden incluso asumir el rol de maltratadores psicológicos.

Además, suelen tener una visión altamente negativa de las cosas, lo que afecta su capacidad para tomar decisiones. Es crucial abordar este problema, ya que más allá de la destreza laboral o el reconocimiento, estamos hablando de seres humanos que pueden llegar a sufrir cuadros severos de depresión, aislamiento o incluso intentos de suicidio.

El neuroticismo también guarda semejanza con el trastorno obsesivo-compulsivo, ya que puede llevar al desarrollo de preocupaciones y pensamientos recurrentes sobre situaciones catastróficas, incluso sin una justificación clara.

Tener un alto nivel de neuroticismo no te convierte en una mala persona. De hecho, puede reflejar una mayor sensibilidad y conciencia que otros podrían no tener. Es probable que seas alguien que cuida de los demás y está atento a sus sentimientos.

¿Qué causa neuroticismo?

No existe una causa única para el neuroticismo. Se considera que los rasgos de personalidad son el resultado de una combinación de factores genéticos, sociales y ambientales.

Las personas que han pasado por traumas, estrés o adversidades, especialmente en etapas tempranas de la vida, tienen más probabilidades de desarrollar rasgos y comportamientos neuróticos.

Cuando alguien empieza a experimentar emociones negativas con mayor intensidad y frecuencia, puede, sin darse cuenta, entrar en un ciclo de retroalimentación negativa que perpetúa el rasgo neurótico. Así, el neuroticismo puede fortalecerse debido a respuestas ineficaces al estrés y a las emociones difíciles.

¿Cómo se trata el neuroticismo?

Cuando las personas con neuroticismo experimentan pensamientos negativos, no es sorprendente que busquen métodos alternativos o mecanismos para contrarrestar o minimizar la posibilidad de que estos pensamientos se materialicen.

Estas estrategias pueden variar desde rituales mentales, como repetir mantras, hasta tratamientos psicológicos para abordar conductas recurrentes típicas de quienes padecen neuroticismo. Estas conductas pueden incluir hiperventilación, impulsividad, movimientos repetitivos, pronunciación de palabras incoherentes, compulsividad y un estado constante de hipervigilancia.

Independientemente de si se trata de una persona con neuroticismo u otro trastorno similar, los síntomas, comportamientos y rasgos descritos anteriormente pueden ser percibidos como extraños, excéntricos o indeseables, lo que puede llevar al rechazo, las burlas y los comentarios malintencionados.

Todo esto puede fomentar el aislamiento social, el retraimiento y la reclusión, agravando el estado de tensión. Es importante recordar que estas personas pueden ser heridas fácilmente, incluso sin intención, y el sentimiento de vulnerabilidad es un componente clave en este conjunto de emociones.

Estas razones son suficientes para considerar la inestabilidad emocional o el neuroticismo como un rasgo de personalidad que puede generar una incomodidad creciente, llegando a desarrollar trastornos psicológicos graves.

Así, el tratamiento del neuroticismo puede abarcar psicoterapia, prácticas de atención plena, técnicas de relajación, ejercicio físico y apoyo social. Estas estrategias pueden asistir a quienes tienen una alta puntuación en este rasgo de personalidad a mejorar su bienestar emocional, cognitivo y conductual.

Al hacerlo, se pueden reducir las emociones negativas, corregir pensamientos distorsionados, manejar mejor el estrés y los conflictos, aumentar la autoestima y la confianza, y disfrutar más de la vida.

Si puedes combinar estos aspectos positivos con un trabajo interno para aprender a manejar mejor tus pensamientos y emociones negativas, podrás canalizar el neuroticismo de manera que sume valor a tu bienestar en lugar de restarlo.

Descubre tus fortalezas y trabaja para mitigar los efectos negativos de este rasgo.

¿Me compartes? 💖
Ayuda a que el contenido llegue más lejos ✈️

¿Quieres ser el primero en conocer los misterios de la Psicología?

Únete a la tribu de Neurita, con la newsletter y disfruta de supercontenidos exclusivos.