¿Sientes que tu estado anímico te interfiere en tu trabajo? ¿Te planteas solicitar la baja por depresión?
A diario, en consulta, nos encontramos pacientes que sufren depresión y se ven obligados a solicitar una baja laboral por dicha razón. Y es que es de sobra conocido que el estado anímico y la salud mental pueden afectar gravemente al rendimiento y productividad en el trabajo, hasta el punto de impedir el normal desarrollo de la actividad.
No obstante, el estigma, el miedo a perder el empleo o la falta de información son algunos de los motivos que llevan a los trabajadores a no solicitar la baja por depresión. Pero recuerda: sin salud mental no hay salud, y tampoco trabajo.
Todos los trabajadores tienen derecho a solicitar la baja laboral por depresión. Pero, ¿en qué casos se puede pedir? ¿Cuánto puede durar? A continuación, desde el equipo de Neurita, resolvemos todas tus dudas.
¿Cuándo te dan baja por depresión?
La depresión es una enfermedad frecuente en todo el mundo. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS, 2021), se estima que afecta a un 3,8% de la población, incluidos un 5% de los adultos y un 5,7% de los adultos de más de 60 años . A nivel mundial, aproximadamente 280 millones de personas tienen depresión.
Según el Manual Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5), los trastornos depresivos abarcan desde el trastorno de desregulación disruptiva del estado de ánimo, el trastorno de depresión mayor, el trastorno depresivo persistente (distimia), el trastorno disfórico premenstrual hasta el trastorno depresivo inducido por una sustancia/medicamento o el trastorno depresivo debido a otra afección médica.
El rasgo común de todos ellos es la presencia de un estado de ánimo triste, vacío o irritable, acompañado de cambios somáticos y cognitivos que afectan significativamente a la capacidad funcional de la persona. Lo que los diferencia es la duración, la presentación temporal o la etiología.
En un episodio depresivo, la persona experimenta un estado de ánimo deprimido, así como una pérdida del disfrute o del interés en las actividades, la mayor parte del día, casi todos los días, durante al menos dos semanas.
Junto a estos, se presentan otros síntomas como la falta de concentración, el sentimiento de culpa excesiva, baja autoestima, desesperanza ante el futuro, pensamientos de suicidio, alteraciones del sueño, cambios en el apetito o en el peso y falta de energía. Como imaginarás, toda esta sintomatología causa un gran sufrimiento a la persona que lo sufre y altera su funcionamiento laboral, escolar, social y familiar.
Pero, ¿cuándo te dan baja por depresión? La baja por depresión se reconoce a los trabajadores cuando estos se encuentran temporalmente incapacitados para el normal ejercicio de sus responsabilidades en cualquier empresa. Para solicitar la baja por depresión debe existir un diagnóstico de los mencionados anteriormente.
Baja por depresión laboral
Normalmente la baja por depresión se solicita por causas ajenas a la actividad laboral. Pero, ¿qué ocurre cuando el episodio depresivo se desarrolla como consecuencia de la actividad laboral? Por lo general, existen dos causas o contingencias por las que una persona puede solicitar una baja por depresión:
Contingencias comunes
Ocurre cuando la depresión se origina por causas ajenas a la actividad laboral como, por ejemplo, por problemas familiares, personales, el fallecimiento de un ser querido o una enfermedad grave, entre otros. En estos casos, es el médico de cabecera quien acredita la depresión y tramita el reconocimiento de la baja laboral como baja por enfermedad común. Normalmente, después del cuarto día de baja el trabajador comienza a recibir la prestación.
Contingencias profesionales
Este segundo caso se da cuando la depresión se desarrolla la depresión por motivos relacionados con la actividad laboral en la propia empresa. Las principales causas de este tipo de baja por depresión suelen ser el estrés y el acoso laboral o mobbing. Es la mutua la encargada de gestionar la incapacidad laboral, que se abona al día posterior al reconocimiento.
Requisitos para la baja por depresión
Además de cumplir con alguno de los dos tipos de contingencias que se han nombrado anteriormente, existen dos requisitos indispensables para poder solicitar la baja por depresión:
- Estar dado de alta en la Seguridad Social en el momento de solicitar la baja. En el caso de los autónomos, es obligatorio llevar al día el pago de las cotizaciones sociales.
- En el caso de una baja por contingencias comunes, la persona debe acreditar que ha cotizado a la Seguridad Social un mínimo de 180 días en los últimos cinco años. Por su parte, en las contingencias profesiones no existe requisito respecto al periodo cotizado con anterioridad.
Fingir baja por depresión
Actualmente se han incrementado los casos de trabajadores que solicitan una baja por depresión fingida, un problema muy grave para el sistema, para las empresas y, especialmente, para las personas que sufren depresión justificada.
En España, el ausentismo reiterado por baja laboral obliga a muchas empresas a contratar los servicios de detectives privados para comprobar si un trabajador está incurriendo en una falta agravante y causal de despido.
Consejo del día: ¡no te la juegues!
Despido estando de baja por depresión
Una de las dudas más frecuentes es si te pueden despedir o no estando de baja por depresión. La respuesta es que sí se puede dar el despido siempre que la causa que lo justifique no sea el hecho de estar de baja. Si se despide por la baja como principal motivo, se considerará despido improcedente.
No ocurre lo mismo en el caso de un contrato temporal. La legislación sí que permite el despido, siempre que se haya especificado previamente en una cláusula del contrato como sigue: «en caso de incapacidad temporal, el contrato quedará suspendido hasta la recuperación del trabajador».
En el caso de los contratos en periodo de prueba, la empresa solo tendría que comunicarle al trabajador que no ha superado el periodo de prueba. Este tendría la posibilidad de recurrir si considerase que la causa del despido es la situación de baja.
Baja por depresión duración
Según la legislación española, una baja por depresión puede extenderse durante doce meses consecutivos. Sin embargo, puede prolongarse seis meses más si el médico considera que concurren varias causas que justifican la ampliación de la baja.
Si después de este tiempo, el trabajador siguiera sin haberse recuperado de la depresión, se le remitiría a un Tribunal Médico para que acreditase la situación de incapacidad permanente. En este proceso de concesión de prestación por incapacidad resulta imprescindible aportar como prueba informes de psiquiatras, psicólogos y médicos de cabecera.
¿Quién te da baja por depresión?
Normalmente, es el médico de cabecera quien se encarga de acreditar la depresión y reconocer la baja por dicha razón. La retribución que corresponde, por lo general, es la misma que corresponde a la baja por enfermedad común.
Una depresión afecta negativamente a la vida laboral de quien la sufre, haciendo que la persona sea más lenta a la hora de realizar cualquier tarea, cometa errores frecuentemente, incumpla los horarios e incluso falte al trabajo sin justificarlo. Por ello, la petición y solicitud de una baja por depresión implica el respeto a la salud del trabajador.
Cómo pedir una baja por depresión
Normalmente, para pedir una baja por depresión es suficiente con solicitar cita a tu médico de cabecera. No obstante, es conveniente estar asesorado acerca de los derechos que te respaldan en esta situación, para lo cual te recomendamos acudir a un asesor online profesional que trate tu caso de manera personalizada, con compromiso y garantía.
Y no olvides que es muy importante ir al psicólogo para resolver tu malestar y cuidar tu salud mental.
En cualquier caso, la prioridad de toda empresas debería ser evitar, en la medida de lo posible, que sus empleados desarrollen un cuadro depresivo. No todas las variables que lo provocan están relacionadas con la actividad laboral, es evidente.
Sin embargo, el trabajo es uno de los espacios de socialización más importantes. Por ello, el departamento de Psicología Organizacional o de Recursos Humanos tiene la importante labor de anticiparse y detectar los problemas de sus trabajadores para preservar su salud mental.
¿Quieres ser el primero en conocer los misterios de la Psicología?
Únete a la tribu de Neurita, con la newsletter y disfruta de supercontenidos exclusivos.
Deja tu comentario