¿Recuerdas cuando Facebook añadió los botones de reacciones, en sustitución del antiguo like? Fue uno de los movimientos estratégicos que llevó a cabo Facebook para resolver una cierta crisis de actividad y engagement, en el que los consumidores no estaban conectando tan bien como deberían con los contenidos.
Aunque en principio pudo parecer poco inteligente este movimiento, de pronto, los usuarios podían expresar más emociones y sobre todo pulsar en más cosas.
Por qué funcionan los botones de redes sociales, Psicología del Engagement
Parecía que no iban a cuajar, todos seguíamos usando el me gusta que aparecía por defecto y al que estábamos acostumbrados. Sin embargo, el uso de las reacciones ha ido creciendo y es raro ver una publicación en la que no se usen. Para Facebook son tan importantes, que las premia ya en su última actualización de algoritmo.
La decisión de sustituir el me gusta por las reacciones no era para nada algo aleatorio, sino que venía marcado por una comprensión de lo que hace que las personas funcionen y qué es lo que lleva a que actúen y respondan a las cosas en la red social.
¿Cuál es la psicología que explica el éxito de Facebook?, y de las redes sociales en general. ¿Qué hace que conectemos con ellas?
Desde la Psicología, las razones por las que usamos las redes sociales han cambiado a lo largo del tiempo. Al principio, se usaban como plataforma para comunicarnos y socializar.
Ahora, en cambio, accedemos a ellas como una actividad de ocio más, para estar entretenidos y lo hacemos de un modo mucho más pasivo. De acceder, contarlo y compartilo todo, ahora entramos para ver, observar y pasar el rato.
Y ahí es donde está las claves para comprender por qué funcionan los botones de reacciones: hacer clic da menos trabajo a la hora de compartir contenidos o de simplemente responder a ellos. Es algo similar a lo que puede ocurrir en Twitter, cuando se da un me gusta. Poco esfuerzo.
Damos like automáticamente
De hecho, el engagement se ha convertido en un proceso automatizado. Cuando se han analizado cómo nos comportamos en una red social y a dónde van nuestros ojos, las conclusiones a las que se llega es que tenemos interiorizado el like, y que eran pocos las personas que se paraban ante un contenido antes de dar un me gusta. Básicamente hacemos scroll mientras vamos regalando likes.
Pero más interesantes es la respuesta corporal al dar ese like. Los latidos del corazón y la respuesta de la piel se activan de una forma similar a la que se tiene cuando alguien entra en un lugar y dice tu nombre. Es un momento muy breve de preguntarse qué ocurre, por saber rápido qué pasa.
Esto explica mucho la psicología detrás de por qué y cómo reaccionamos ante las cosas en redes sociales. Pero también es un medidor de lo que esperamos y de lo que a las marcas les importa.
Si das like a algunas publicaciones sobre calcetines, por ejemplo, lo más probable es que pronto te vaya a comprar calcetines. Es casi como un previo fluir de la conciencia.
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